miércoles, 30 de diciembre de 2009


JULIO GONZÁLEZ ALONSO

*
DE LA CONDICIÓN HUMANA

A excepción del hombre, ningún ser se maravilla
de su propia existencia.
................................Arthur Schopenhauer


Minúscula silueta en el desierto,
sombra de un ángel nuevo, un dios vencido;
humana criatura, sol herido
alzado en solitario desconcierto.

Te sabes antes que nacido muerto,
ser antes que memoria, sólo olvido;
efímera la vida y lo querido
por la mano del tiempo ya cubierto.

¿Cómo sacando fuerza de flaqueza
a un cielo de universos infinito
proclamas la razón de tu certeza?

¡Qué admirable pasión, si el desatino
de esta vida y de toda su riqueza
de Nada ir a la Nada es su destino!


Julio González Alonso


*****

TIENES LA EDAD DEL AMOR

Como viene el mar azul sumiso
a la tierra volcánica,
en besos húmedos
tú llegas a mis costas,
entretienes mis arenas en tu boca
y abrazo la cintura de tu agua. Tienes
la edad del amor,
la que imparable asciende en risas a los ojos
llenos de luz de mediodía – y no hay
defensa,
no hay combate posible
en el campo de mi piel,
tierra donde dejas
el rosario de cuentas en huellas de los labios –

¡Qué resistencia inútil
al ocaso de los años; qué estéril
el vano enfrentamiento a la pujante vida!

Te contemplo a la caida
de las tardes de verano
con los últimos soles en los cielos de los días.

Te contemplo

sabiendo que las noches
pondrán racimos estrellados a los sueños
de antes de la madrugada,

cuando el mar azul sumiso llegue hasta las playas
con sonrisas de espumas en las olas

y el viento, cambiante, arrastre
las últimas caricias
a poniente.


Agua Amarga, 25 de julio de 2006


Julio González Alonso


*****

LA ARQUITECTURA DE LA ARAÑA

La ciudad se teje de hilos luminosos, metales
que ruedan, cimientos en el aire enrarecido.
Como la inmensa red de la arquitectura de la araña
extiende su abrazo mortal por el espacio
entregada a las manos invisibles
de sus sueños, aturdidas pesadillas de neón
y de cansancio, el frenético zumbido que recorre sus arterias
y golpea en latidos moribundos todas sus extremidades.

Allí es el hombre, lepidóptero o gusano constructor
en su crisálida; allí es el vuelo al destino de la muerte,
el gemir breve del sexo en amor de alcoba,
allí es la luz del gozo efímero cuando cae el día
engullendo la noche de las calles y los supermercados,
cuando se detiene el ritmo acompasado
de su corazón de trenes suburbanos; los quirófanos
duermen. Cuando traspasan los océanos las palabras sonámbulas,
qué cabe esperar
si las mariposas se extenúan volando alrededor de millones de soles diminutos.

De ese hilo resistente,
de esa tela de araña
de ese mundo interior
vengo.


Julio González Alonso

jueves, 24 de diciembre de 2009

.

MARÍA GARCÍA ROMERO

*
ALZHEIMER

Como soñando habla,
igual que en un ensueño,
trayendo del olvido,
llenos de polvo y lágrimas,
azahares marchitos, enmudecidos pájaros
y, rostros como ceras de amargos limoneros.
Oh hermoso corazón.!
Oh canto inagotable!...
Uno a uno los nombras
y, en el aire, en la casa
flotan rosas y espectros.
Y ya nadie conoce,
quién es quién frente a frente.


María García Romero

Este poema fue seleccionado por Dolors Alberola,
para la revista del mes de septiembre "Sabor Artístico" .


*****

La Mar que resbala por mis hombros,
el cerco numantino de mi sombra.
Tu pie izquierdo en la noche,
el derecho en el alba.
Sobre el cielo estrellado,
ese tambor de roca que es la luna.
En mi puerta la tierra de mi infancia.
El ángel del amor, mirando sin pupilas
la blanca flor del cactus.
Entre las líneas de un mensaje,
la música brotando,
como si sólo hubiera un hombre sobre el mundo
y, mi rostro de barro, mudara con sus manos.
Y siempre estuve allí,
y este silencio, tan sólo sea un sueño
y, al despertar, no podré recodarlo.


María García Romero


*****

HERMANOS

Unos cantan y aman
la raíz de su canto.
Otros fueron la sombra
despiadada del viento.
Hubo quien recogió
del infierno, sus lirios.
Quien nunca tuvo edad
y, fue tan sólo polvo.
Quien siendo luna nueva
pudo también mutar,
el sol en un eclipse.
Hijos hambrientos que,
devoraban locura,
cárceles, soledades.
-Brújulas que marcaban
el Sur, en vez del Norte-
Inviernos que surgían
de veranos de angustia
y, una noche alargada
en todos los espejos,
de juicio sumarísimo
sobre cada conciencia.


María García Romero

jueves, 17 de diciembre de 2009




ADRIÁN PÉREZ

*
CUATRO PAISAJES DESDE UNA MONTAÑA


INVIERNO

Un incesante cierzo huracanado
traspasa la tersura de la nieve.
Muestran sus esqueletos de madera
los árboles desnudos en silencio.
Lanzan los fuertes robles su mirada
hacia los encinares que vestidos
de hojas perennes pasan el invierno
así agoniza un corazón desnudo
cuando su hoja marchita arrastra el viento,
frío, triste, sensible, solitario,
caduco, sin un manto que mitigue
el hielo en la terrible soledad
instalada en la angustia de los hombres.
¡Ay! Árboles que sufren un invierno
crudo de lluvia y nieve desprendida
al marcharse los días soleados.


*****

PRIMAVERA

La suave brisa, el tibio sol que llega
acariciando la redonda cima
de la hermosa montaña aún nevada.
Contemplo el nacimiento de los verdes
brotes que van surgiendo de las ramas
mientras vas despertando, primavera.
Se agolpa palpitando aquella sangre
que permaneció quieta con el frío,
renaciendo la savia adormecida.
Ya se ven florecidos los romeros,
los pequeños tomillos perfumados
que con su dulce pálpito enamoran
como una fiel caricia recibida.
Cada año al regresar van resurgiendo
todas las inquietudes y deseos,
los sueños que queremos ver crecer
en la naturaleza florecida.
¡Es hermoso pensar en ilusiones
que pueden florecer en primavera.


*****

VERANO

El fuego del bochorno abrasador
tiñe con su color de limonares
las espigas doradas de los trigos.
Se terminó el verdor primaveral
y florece romántica la rosa
rompiendo los desnudos corazones.
Verano, aquí te aguanto en la montaña
cercano a la frescura de la fuente.
Escucho esquilas entre manzanilla
sintiendo los olores del espliego.
Recibo un suave amor como una fruta
silvestre, como el canto lisonjero
del ruiseñor que llena todo el valle
con el dulce sonido de sus trinos.
¡Oh verano! En tus noches estrelladas
laten los corazones que se juntan
mientras voy recogiendo la sonrisa
que brota de unos labios perfumados.


*****

OTOÑO

Se desprenden las hojas en silencio
de los caducos árboles, sin rumbo
el viento del otoño las arrastra
con una amarga pena horticultora.
Se caen como un lento amor nacido
en una noche loca de verano,
entre gotas de lluvia como lágrimas
tristes de una esperada despedida.
¡Ay, otoño! Que llegas tan despacio
cambiando los colores del paisaje,
dejando tus imágenes doradas
en los chopos al lado de la fuente.
Sopla el cierzo anunciando un frío invierno;
se desnudan las ramas de los robles
y las encinas siembran sus bellotas.
Se desnuda el amor de un corazón
que en un suspiro el viento fue arrastrando.
Quizá vuelva a brotar en primavera
mi corazón herido y deshojado
como los fuertes robles siempre altivos.


Adrián Pérez

miércoles, 9 de diciembre de 2009


VENEZIA LESSEPS

*
UN PELDAÑO TRAS OTRO

Un peldaño tras otro
la luz desciende lentamente
por la alta balaustrada de la tarde:
vienes a mí como un corcel cautivo

como un corcel al viento de la tarde
vienes, como un mágico cántico
coronando el perfume de las flores silvestres
y de las madreselvas.

Y yo, que espero en la nostalgia espesa
de mi cuarto burgués: sobre un jarrón
de flores marchitadas la marina del fondo,

el canapé de raso, la ventana entreabierta
que mira a la bulevar y mis recuerdos
enredados entre papel y versos … y un teléfono sordo.


Venezia Lesseps


*****

ORACIÓN PARA UNA MADRE

Gracias diosa mía, por sentirte.
Gracias por no haberme creado como a los demás:
insensibles, tozudos, ostentosos asexuados
e ignorantes como perros.


Gracias por haberme formado
a tu imagen y semejanza.
Odio a Wolfe y a Carver
madre, lo juro.
seguí tus enseñanzas.
Las seguí, lo juro
odio a Wolfe y a Bukowski.
Por qué me rechazas entonces,
madre.


Madre, te amo.
Te amo, madre.

Ya somos una muchedumbre.
¡Me cuesta tanto olvidarte¡
“Allo, allo maman, bobo,
maman comment tu m´a fait j´suis pas belle »*

Madre, viví en Clitemnestra
y ahora soy Orestes, madre.

No puedo olvidarte,
olvidé quien soy,
Madre, por qué me creaste así.

Somos muchedumbre
los paridos por tu útero bendecido.

Madre, soy así.

Lo intento, madre.

¡Pero me cuesta tanto olvidarte¡


Venezia Lesseps

miércoles, 2 de diciembre de 2009


FELIPE FUENTES GARCÍA

*
ANGOSTURA

LA LUZ se adelgazaba lentamente
en el hondón del tiempo. Tú
todavía cabías en sus ojos.

Luego su ausencia entera entraba en ti
como nieve en el humo,
como el silencio
en la ahogada latitud del páramo.

Tú hilabas
un vellón de dolor interminable
bajo el oscuro blanco de aquel rostro. Ibas
de rama en rama entre sus párpados
como el ave sedienta de la luz que sostenía
el solo amor en vela de su cuerpo.


Felipe Fuentes García


*****

MALVA Y GRIS

APENAS queda sed en los varales
de un verano ya muerto. El griterío
de la niñez del verde baja al río
a lavar la memoria de cristales.

Los álamos del tiempo hacen señales
con pañuelos de fronda, graderío
de luz encaramada al desafío
de la hiedra que nubla los tapiales.

En surcos los silencios desperezan
polvaredas del barro. Tras las eras,
mientras, veladas cúpulas de calma,

los humos blancos de la aldea rezan,
la soledad arrasa las banderas
—malva y gris— de los páramos del alma.


Felipe Fuentes García


*****

EL ÓLEO DEL DESVÁN

ALZO la luz y, al parpadeo,
una forma se adentra y abandona
el claroscuro. Advierto que la siguen
unos ojos tras grumos de arcilla o de ceniza.
Y no sé si se enciende
algún verde inmortal en su mirada
o si es el arte, acaso, el opio
que recrea el latido o lo alimenta.
Vago en mi sombra y brilla el aire.
Alzo la luz y creo la tiniebla.
Y se elonga el temblor desde el recuerdo
hacia un recinto en el que pugnan
la mirada, el fanal y el bastidor.


Felipe Fuentes García

lunes, 23 de noviembre de 2009


MARIAN RAMÉNTOL

*
EN SU HONOR ME HICE POETA DE AUTOBÚS

.........................A José Mª Pinilla Ballesteros

El tizne del carbonero, su barba
y los sueños que pasan sin hacer ruido,
resumen los colores de la tarde
en cataratas de verbos que se van
dolorosos, sobre la caricia de los ojos.

Las flores olvidan, nosotros también.
Sin embargo el horizonte lleva en la frente
el ácido desaguado sobre las sílabas
de un idioma tan antiguo, tan silencio,
que siempre se acuerda de nombrarnos.
Es amable a pesar de su dislexia
y del ruido de todas las miradas.

En su honor me hice poeta de autobús,
caza-porterías donde la poesía duerme la última
borrachera antes de despertar a Dios,
porque siempre he sabido que los besos
duermen demasiado deprisa,
sus pechos bombean el vacío
a la espera de la casualidad de un hombro,
de la oportunidad de un mar entero, abriendo su carne
de lágrimas calcinadas a la lluvia, al pájaro,
al pez entre suspiros de un cielo asustado.

Y ahora tan sólo me queda un minuto para seguir muriendo
antes de que el despertador derrote a mi suerte.
*
*
Marian Raméntol
*
*
*****
*
PUEDO VENCERTE, DICIÉNDOTE SOLO A MEDIAS.

..................Recuerda que tú existes tan sólo en este libro.
.............................................Luis García Montero


Puedo asesinarte
cauterizar el borde de esta página,
poner en la punta de mi incendio
el ascensor de tu tristeza
y bajarte con cuidado al accidente de mis dedos,
eso te destrozaría.

No sería difícil imaginar tu tumba,
tu último disparo volviendo borracho de una estrofa,
quizá del propio corazón del poemario al que te anclas,
pero recuerda que yo fui soldado antes que tú
y que conozco bien el límite del océano
y la vacante promesa de las olas,
el retroceso de los sueños en el hombro,
y la oración de unos ojos ya vencidos.

Puedo abrazarte en el fondo de un vaso
y dejarte sobre el hielo, sin heroicidades,
sin la compañía de cisnes, ladrones, lunas o tejados,
sin más prisa que la indigencia moral del impulso,
siendo tú el único pellizco real del libro
al que le has vendido la vida.

Nadie impide que te odie
cuando te vistes de pétalo, con la lucidez
de primaveras de esparto
suspendida en un cielo inexistente.
Te odio más
cuando te escondes en la prisa de un mal verso,
y no hablas, bombardeas
la soledad de una lágrima.

Juro que puedo detonar tu geografía,
hacer de tus vísceras un big bang del ingenio,
hacer que flotes sobre el barro del poema,
o que pida la palabra tu fracaso, la vanidad de tu luz
inclinada sobre el puerto.

Puedo vencerte, te lo aseguro,
diciéndote sólo a medias, como un olvido necesario.
*
*
Marian Raméntol
*
*
*****
*
*
Nota de la Autora: Ambos poemas pertenecen a una nueva antología del grupo Poético Laie (Barcelona) que tras la muerte de nuestro compañero, poeta y editor, José María Pinilla, no llegó a ver la luz. Agradezco a Oasis de Palabras la oportunidad de mostrarlos ahora como homenaje póstumo personal a quien mantuvo siempre un compromiso inquebrantable para con la poesía.

martes, 3 de noviembre de 2009


MANUEL MARTÍNEZ BARCIA

*
SECUENCIAS DE LLUVIA

I

Pudo ser agua la gota en el tiempo,
y llegar aún más lejos
de lo que nunca podría imaginar

Fue al principio un sueño

Luego un paisaje en su mismo origen
mojado por la lluvia

Y la lluvia fue del mar
como sangre en la nieve,
que arde en el origen
de la nada fluyente
y en su seno amanece

Una lágrima de mar,
tomó del agua la sal
antes de ser herida
que naufraga en su herida,

y añora la corriente en que regresa
el goteo del agua a su memoria;

mientras siente la sed en la distancia,

aquella humedad que nunca se olvida
de otra existencia en el mundo inicial,

como la nostalgia que moja los pies
con caricias venidas de la lluvia.


II

Dichoso el mar que abandona su seno
y acaricia la cima
de espuma adolescente

Entonces, sí. La sal era sencilla,
con los pies de agua y ojos de luz,
que de cielos inmóviles se adueña
y sus jardines de sol

Triste es la desnudez del grito de la sed
de la lluvia que llora
abrazada a su fría soledad

Se desangra la nieve
cuando el deseo se rinde al silencio
en los márgenes ignotos del querer

Y también mueren las olas más altas,
fascinadas por la furia desmedida
de su propia plenitud.


III

No hay lugar para el juego de la lluvia
en las horas psicodélicas del mar

Se está quemando el agua,
y arde su memoria en la luz mojada
que tras la rebelión de los espejos
sucumbe en su espectro frío y ciego

Y no cesa de llover
en el caos de la demencia de la sal
esposada al furor del que se nutre
mientras fluye el espíritu de la sed

Gemidos bajo gotas de utopía
galopan a caballo de la espuma
que liberan la etnia de las olas
de su tan alucinógeno trance

Y sin música ácida en el alma
se asieron a las manos de la nieve
manantiales de humedad
que lavan las cenizas de la sangre

Y la tenaz insistencia del agua
sólo reclama las huellas desnudas
olvidadas en su propia orfandad.


IV

Cede el agua mientras callan las sombras
en el himno a la emoción,
donde la luz se desmaya en su eco
y encienden los oasis sus fronteras

No hay ruido, no hay dolor
en el temblor del miedo a la soledad
del último latido que agoniza;

sólo soplos eternos
de suspiros en las gotas de la muerte
que pueblan vida y sangran el vientre
en el umbral de los signos vacíos
que sonríen al partir.


V

Y después de las lluvias torrenciales,
en el mar que también tiene jardines,
se acentúa el aroma de la hierba
suspendida en las tibias moléculas
del agua que se esposa a su grandeza

Y en ella se respira
el aire de los sueños misteriosos
que se funden en vientos de sí mismos,

y evocan la presencia de fantasmas
que desvanecen en golpes de espuma
los gestos de la ira,

que ya no tiembla; se aclara, y muestra
la calma de los cielos inmóviles
y paz en el origen de la furia.


Manuel Martínez Barcia


*****

PÁJAROS DE LUZ

Dictado por la noche,
viaja el fuego en crepúsculos de nieve.
Es tan sólo el paisaje del invierno
arbolado en las sombras de sus llamas

A tientas en lo oscuro que fluía,
dos formas misteriosas sin sustento en su raíz
emergen de la bruma

Eran pájaros de luz,
traían en sus alas las claves del enigma,
los signos del silencio
de aquello que allí existe y nunca vemos

Luego llegaron
miradas invisibles,
caricias en mi piel hecha de sueños,
y besos que traspasan laberintos,

y estrellas que se apagan y se encienden
en tu cuerpo de diosa.


Manuel Martínez Barcia

miércoles, 7 de octubre de 2009

ELSA TENCA MARIANI

*
NO FILM

Idioma infinito del mar
sinfonía
resonancia de acordes
PLEAMAR
captura la memoria del
desierto .
Expande otro idioma
melodías
gotas de silencio
silencio espeso
tensión del silencio
silencio en tensión
tensión máxima
B
A
J
A
MAR

Piel de naufragios
Mareas del tiempo.
Camarógrafo anclado
filma

Galopa en sepia
un Rugendas
Nos mira el Puerto.


Elsa Tenca Mariani

*****

VENUS

Descuelga ese friso
brumoso manto
seda y obsidiana
Único indicio
en el planeta.

Descubrirás
el templo de Venus
con sus tardanzas.

Cautelosas ceremonias
devuelven su imagen
la separan
de aquella otra
invasora
reinante en un tiempo

Descuelga ese friso
Es necesario
ahora.


Elsa Tenca Mariani

*****

MEMORIA

El centro del amor no siempre coincide
con el centro de la vida":
Roberto Juarroz--

I-
Acompañado por una multitud
no estuvo solo
ante la muerte.
Apoyado en el límite de la luz
del mediodía
filtrándose por la ventana.
La partida fue ceguera
durante el concierto
de melancolías
sinfonía extraviada
recuperada en la raíz
de la propia historia
Con ese perfil de bruma
confusión
sobre su cuerpo
desapareciendo.

II-
Enigmáticos hilos
unen a Él
con el universo
su Palabra
los ideales
tambalean
sólo un momento
cuando la eclosión
de mariposas prematuras
son fusiladas por
el cruel invierno.
Irracional tempestad
girando en las hélices
de los aviones
rompen
la armonía de campanas
confunden
extralimitan.
Quedaron unidos los sitios vacíos.

III-
El amor abre la herida primitiva
se escurre
plegaria
crujido de su mirada.
Quedó adherido el polen
a su cuerpo.
----------------------A:-S. Allende G., in memoriam-


Elsa Tenca Mariani

*****

RITUAL

Todo se dispersa
momentos
instantes breves
lentos cambios
se aproxima
la memoria
agazapada
espera el ritual
de los días.

Todo se desdibuja
azula la ciudad
crea enigmas
funda la tarde
desaparecen contornos

Lo irreductible vuelve
la noche servil
destruye bordes
invade el terror
el rey es destronado


Elsa Tenca Mariani

Los cuatro poemas pertenecen al poemario:
"Daga de cristal"

miércoles, 23 de septiembre de 2009


ANDREI LANGA

*NOS ACERCAREMOS A LA ETERNIDAD

Nos acercaremos a la eternidad,
Aunque la muerte aún nos confunde
Con unos pájaros andando sin alas,
Caídos desde el cielo cerrado.

Así caminamos por las viejas montañas
Cubiertas de una nieve obscura,
Mirando hacia atrás con temor
Por nuestras vidas tan delgaditas.

Nos acercaremos a la eternidad
Aunque la muerte aún nos persigue.
Si somos pájaros seguimos así
Hasta que las alas nos crezcan.


Andrei Langa (Traducido por él mismo)

*****

NE APROPIEM DE ETERNITATE

Ne apropiem de eternitate,
Cu toate că moartea ne mai confundă
Cu nişte păsări păşind fără aripi,
Căzute din cercul cerului cast.

Aşa păşim peste munţii bătrâni,
Răniţi de zăpada devoratoare,
În urmă privind cu o teamă ascunsă
Pentru răpirea vieţilor noastre.

Ne apropiem de eternitate,
Cu toate că moartea ne calcă pe urme.
Dacă păsări ne e dat ca să fim,
Vom merge pân-când aripile ne vor creşte.


Andrei Langa (En rumano, versión original).


*****

A NUESTROS POEMAS LES DESCUBRIMOS

A nuestros poemas les descubrimos
Aquí o allá con los ojos abiertos,
Así como a unos niños nacidos
Recientemente, gritando o mudos.

Veamos de nuevo a sus cuerpos desnudos,
Apenas queriendo reconocerlos…
A nuestros poemas los encontraremos
Muy alejados de las palabras.

Con unos rostros de luz u obscuros,
Volcando el tiempo y el espacio,
Hay tantos poemas que ya no son nuestros
Y nadie sabe si nos reconocen.

A nuestros poemas nada les falta.
Viven en mundos disparatados.
Y este poema nos está mirando
Con un ojo de luz y el otro oscuro.


Andrei Langa (Traducido por él mismo)


*****

POEMELE NOASTRE LE DESCOPERIM

Poemele noastre le descoperim
Alături de toate, cu ochii deschişi,
Aşa ca pe nişte copii nou-născuţi,
Tăcând sau ţipând în termenii lor.

Le recunoaştem formele nude,
Chiar dacă nu vrem ca să se-nţeleagă.
Poemele noastre le descoperim
Departe, în lumea cuvintelor mute.

Mai luminoase sau întunecate,
În timp şi în spaţiu inoculate,
Poemele noastre se înstrăinează
Şi poate să nu ne mai recunoască.

Poemele noastre sunt tot mai complete
Şi tot mai departe de viaţa diurnă.
Acum şi poemul acesta priveşte
Cu-n ochi luminos iar cu-n altul - cernit.


Andrei Langa (En rumano, versión original)

lunes, 22 de junio de 2009


MARISA LEÓN

*
A TI, INAUDITO ENSAYO

Las frondes de tu palabra
rizan, detienen al viento

todo permanece quieto
esperando la inquietud
la conjura de tu benevolencia.

Oteando entre las estrellas marinas
y los pliegues del mar
de un mayo ermitaño.
De repente
se abre el novel apunte
de tu primer verso.

Se descubre la flor a la curiosidad
actor y público de tu jardín de vocales

¡las paredes tiemblan ante tu risa!
Silba peregrino ante la muerte del silencio

por el pecado
o la gracia,
de saberte desnudo.



---
mayo malaquita y nomeolvides.


Marisa León

*****

SOY LA VOZ DEL TIEMPO

Soy la voz del tiempo
y del tiempo soy mudez
y del clamor soy la voz rebelde
y de las cadenas soy la voz que hace enloquecer
y soy la voz del viento y del tributo

soy la voz del misterio.

Soy de tierras negras
de basaltos y aguamarinas
del himen del mar somnoliento
como una raíz encarnecida por la lluvia
como una estrella indeleble.

Soy agua y una cordillera de hematites
liviana y orilla, columna de heliotropos
soy un pilar y una costilla
una vasija fundida en lagares de ópalos
simiente de un ave emigrante
soy templada espada que combate incertidumbres

y grito con voz de nube.

Antiguo sortilegio
de bosques
tamizados por diosas de aguas.

Soy la voz
la voz atávica de un dragón
fuego y arcilla, lluvia, fin.

Soy la voz que cura y mata
que aplasta y eleva
la que maldice y honra
la voz que envenena y siembra
la que dirime y encarcela.

Soy código de luceros y amanecer de llantos
esfinge de universos y sueño de alquimistas
y soy la voz, y callo, y canto, y callo y grito
y soy la voz cuando amanece la vida.

Soy la voz de los sueños
soy eco muriendo de amor

y grito con voz de agua y de cenizas.




---
Abril centáurea y astrofilita


Marisa León (Canarias)

lunes, 15 de junio de 2009


MIGUEL ÍÑIGUEZ

*
CARIÁTIDE EN LOS POLÍGONOS

Total: El acero
de los hombres del carbón y del acero
ensayan sus pómulos,
ensayan como amos, como agujas
mi-tu-todo en sus aristas

así de golpe
hombre de un solo día.

Qué digno temblor se escucha
entre los dedos
ruido delgado su tridente
dulce soberbia y soberanía
su arranque,
su hélice, su testa
galvanizada lo reverdece.

Qué ascesis técnica,
qué amables campanillas
son los cinceles
que sobre ellos se posaron

así negocian
así de golpe
a trueque negocian los místicos
yunta y parábola cerrando sus líquidos.

¿Cuándo la curva de vuelo
a sus clavos entrega?
Blindaje de especias
tañen sus órbitas; lindan

ensayan así de golpe
cual dúctil aurora
salto dialéctico en los polígonos.


Miguel Íñiguez

*****

ÁRBOLES CIUDADANOS

Rezaré la noche huidiza una vez más
con adagio de árboles ciudadanos
respirando esa lejanía,
que con sus últimos vehículos me añade
motor, también ruido de vigilia y asfalto
conectado a los hombres
para no volverles la espalda.

Sin saber por qué ha de venir
pasaje de angostura,
claroscuro creciente de luna,
sobre vidrios de advertencia
parabólica voz
posarse en los hombros.

Huelga de un tiempo de un espacio
con el brillo de los ojos; sus líneas,
una raíz cúbica una razón plástica
edificada,
entre gremios afables,
nuncio en la plaza y rumor de avenidas.

Rezo arquitectura
al pie de los vehículos
en la ciudad de las luces
conectado a los hombres.


Miguel Íñiguez

Su Blog:

Estación de acacias

domingo, 24 de mayo de 2009


VIVÍ MASSARES

*
TORMENTA

Si la noche me empapa la intuición de ceniza
y abundo fosca lumbre de líquidos contornos
dónde el incendio inclina su textura de fauces y me pierde
derramada, disuelta,
torrente depredado de ternura.

¿Ante o dentro de mí?
El fuego. ¡El fuego!

Tempestad subcutánea curvando las rodillas
hasta la exhumación de lo nefando...
Y la pira arrasada de sudor. Me hundo. ¡Lloro!
Heme imprecando el beso, rasgando de caricias el rencor,
calcinando hipogeos con guantes de melaza
y un Lobo apura ascuas de mis restos
sobrevuela la tromba
sumergido en mis ojos.


Viví Massares

*****

HUMO

Huyes de ti, escanciada
del cuenco más absurdo de la muerte,
indolencia excedida de matices sin fe en lo bosquejado:
no urdiste lienzo debajo de las tibias pinceladas
y huyes sin atreverte a ya no respirar
o aceptar respirado lo vivido
como al humo de las deflagraciones de los campos en tiempo de cosecha,
no bostezos del dorarse en el pan, como pudiste,
sino consumición de las espigas,
y sobre el limbo, entonces, arañas un descuido ceniciento
que no llega a barbecho ni a piedad.

Si al borde de los llantos regresaras las huellas,
rehilaras la matriz de los equívocos hasta el borrón,
no cuenta nueva, sólo
hasta la niña que regresa o que
sólo renace sol
sueño dentro de sueño sobre la fumarada de los campos,
sin saber qué es el trigo o qué las pinceladas para el tiempo a vivir
y sin el doble puño de aliento residual sobre el paisaje,
huyeras de la niebla al horizonte
y tuvieras del humo
un único temblor con que salvar tu nombre emborronado
en la transmutación de las hogueras.


Viví Massares

domingo, 3 de mayo de 2009


PEDRO ARGUEDAS IBÁÑEZ

*
OPUS

Y un alma detiene su principio
detiene el rayo estelar de su mirada en el anciano cíclope
en su frente de cal
en la baba que cae de la ruina al verso
para extasiar el polvo de una huella sin forma
los dioses en las jaulas flanqueando el primer paso
los alaridos blancos y negros de la tundra o del mar
o del desierto ponen un sol entre los labios
para sumir el tiempo en la palabra
y así
cualquier estiramiento de la voz
será como el dedo taumatúrgico
con que la obra toca su nombre en la distancia
con que la obra mata la distancia de su nombre
con que la piel y la conciencia se renombran.


Pedro Arguedas Ibáñez

*****

DUERMO

Duermes
y acaso sea la virtud
de todo temperamento
la indómita vértebra con que suspira
lo que la boca no alcanza con sus ansias
Despacio
el rostro extiende su volumen subterráneo
a través del poro y la techumbre
de su nombre aquietado
por este silencio en que los ojos
apenas dos bultos sin identificar
ocupan el lugar del corazón fuera del pecho
que ya no es de la piel
ni es estatura
ni piedra sentimental que el verso amasa.
Hay pasos renuentes
de la última frontera
hay voces que revuelven la sangre
en el pulso del éter
en los estribos de la contemplación y la distancia.
Hay una mano que repasa la materia
en cualquier objeto
en la segregación de la forma en la que anida
el vórtice propicio de lo vírgen
de lo negro
Y en todos sus dedos estás tú
durmiendo
con todos tus párpados
con todos tus vocablos
cerrándose en torno a la única mirada
que abarca y que respira
la realidad del verbo.


Pedro Arguedas Ibáñez

jueves, 23 de abril de 2009


PATRICIA ORTÍZ

*
RÍO DE LOS PÁJAROS

"El viento del atardecer lavó su desconcierto."
Manuel Scorza

El viento agolpa rebaños de lunas anaranjadas en el horizonte ardiente. Un nuevo atardecer crepita ahogando al día entre sus brazos mientras se despereza la noche en un cuarto de hotel. El Pilcomayo ha olvidado todo límite y sus aguas inconscientes se desbocan. Se subleva ante todo – todos y trepa a los árboles, de nido en nido liberando a sus hijos. Allá en el fondo confundidos, unos dorados se unen a un cardumen de surubíes. Prendido a la pollera de su madre en el techo del rancho, un chango reconoce la palabra hambre. Un bote zigzaguea rescatando tristeza y desde una radio inconmovible se pronostican lluvias y desconciertos.

Patricia Ortíz

*****

DÉCIMA II

"Me nutre la osadía de la caricia viento"
Gustavo Tisocco

Si por fin me permitiera
soñarte mi amor, soñarnos
amarnos y desarmarnos.
Si abrazarte amor pudiera
si la razón decidiera
cómplice, como al descuido
dar rienda suelta al latido.
Sería el cielo porteño
testigo fiel de este sueño:
del amor, luego el olvido.


Patricia Ortíz

jueves, 5 de febrero de 2009


FERNANDO SABIDO

*
LA ETERNIDAD

Suspendidas en la duración de Zeus, deslumbrantes
estatuas entonan panegíricos a los dioses del Olimpo
Erectas, con los ojos saturados de belleza inacabada
semejan espíreas que gritan o susurran en función
de un viento despiadado

Rebosa el tiempo y las excita un ansia de inmortalidad


Fernando Sabido

*****

SOLEDAD

Caminas hasta un polvorín de hielo
a descubrir otros cuerpos desnudos
y te humedeces el sexo a través de la mirada

Nada especial ofrece ese lado oscuro
apenas un lugar colindante a la imaginación
con el que aún no has coincidido

Brasas que se apagarán en unas horas


Fernando Sabido

*****

DESCONFIANZA

Aborrezco a los que acunan en sus brazos la belleza
sin atreverse a complacerla,
no son seres de otros mundos
están a nuestro lado, por todas partes
Aseguran cerrando los ojos que el amor, la amistad
y la solidaridad no les conciernen

Hoy tienen miedo y sus propósitos son ambiguos
Mañana será demasiado tarde


Fernando Sabido

Córdoba - España

miércoles, 7 de enero de 2009


MARISA LEÓN

*
ARAÑAZO

Ya sé que soy una bomba de fusión en potencia
que todos mis átomos de hidrógeno están desordenados
desordenada también mi imprudencia temeraria por lamerte
los ojos y la nuez de la garganta, tu ombligo y esos lunares de café.
Ya sé que te bebí una tarde de noviembre y me abriste el apetito y la carne
desde entonces soy vagabunda en tu espalda y en tus desatinos;
cada noche me duermo entre tus arterias de granados y tus columnas de mar vencido
y rastreo tus sueños hasta aquella costa donde bucea tu deseo
y soy Isis, soy Cibeles o Yemanya conquistando esa boca de tiempos desnudos.
Invoco a la Luna menguante en escorpio, haciendo una batida en tu cama
inmanto tu patria y afecto aparcados en mi iris de bosque perenne
amarrando con clavo y limón tu distancia hasta mis estancias
donde revuelas mi costilla, los ventanales descubiertos de mi mirada
y habito tu fijación perdida en mi rostro y muero,
muero escarbando tus mascullos, muero de mi en ti,
en tu arañazo hacia mi casa infinita.

Agosto ojo de halcón y caña dulce

Marisa León

*****

EMBOSCADA

A mitad de camino mi vida,
de repente me hallé en un bosque oscuro…
Dante, la Divina Comedia

Cuánta razón ladina hay en un trance de confusiones
en una esquina de los temporales de la vida,
en un socavón de cualquier calle de las profundidades
peor aún, en el oscuro lugar que ocupa las entrañas,
al tocar fondo y encontrarse sola ante una silla vacía.
El espejo me devuelve una desconocida
carnada para la frialdad de Saturno, devorando mi savia.
No hay cédula de regreso. Emboscada del depredador.
Un celaje en el horizonte que humilla al tiempo saturado
alucinado temporal que medra al más valiente
rindiendo cuentas con el mismísimo infierno.
Allí, en aquel abismo, una gota de luz o agua se entrega
se desprende la venda que ciega
y nacen unas alas –de mariposa- al filo del vacío…
Alas de lágrimas cosidas a la espalda, donadas por la luz,
lentamente vuelas hacia el resplandor
y un mar tan antiguo como el tiempo se abre a los pies
y prendes la flor de ajos locos a tu boca
habitando viejos desiertos, ahora balcones floridos.
Vuelo, vuelo tan lejos como quiere mi sonrisa
para libar el néctar de las esencias.
El empalago de la melancolía deja un sabor amargo
y en aquella emboscada, prometo adivinar sombras y luces
y aunque torcido el hilo sigues en tu ajuar de bosques…


Septiembre selenita y amaranto.

Marisa León
(Canarias - España)

VÍKTOR GÓMEZ FERRER

*
GAZA, 2009

Cuando dijisteis: Una tierra sin pueblo para un pueblo sin tierra,¿no había árabes, trigales, pinos de Alepo en nuestros vallesy gargantas desde el Mar de Galilea al Neguev?
Angel Petisme


"La celda no tiene muros"
Mahmud Darwix




CONvenir podría ser suficiente
aunque pesa lo callado
el(lo) que en la diáfana hoja se
deshace de tintas y formas
Y aun la lágrima
que sobre nada cae y deja el círculo
abierto y aun ese
mojado papel en cuya superficie
morosa la tinta resbala
todavía sin señales
todavía aún
son las identidades de nuestra
orfandad

Como
una Franja crece enrojeciendo
la tierra de nadie
sin el(lo) como /ofensa a los niños
insoportable: no poema, grita
como si fuera el último día sobre la tierra
*
*
Víktor Gómez Ferrer
(De la serie "La Franja de Gaza" que aparecerá en el poemario "Los Barrios invisibles".)


*****


La risa danza
y nos hace inalcanzables


..................................(El misterio de África)

Víktor Gómez Ferrer (Valencia)

Del poemario "Los Barrios invisibles"

Víktor Gómez publicará el poemario "Los Barrios invisibles" en Febrero 2009
Te deseamos todo el éxito del mundo, querido poeta